8.1.08

Construyendo futuro...

Un gran guerrero japonés llamado Nobunaga decidió atacar al enemigo pese a tener solo una decima parte de los hombres de que disponía este. El sabía que la victoria sería suya, pero sus soldados dudaban.

De camino, hicieron una parada en una hermita Shinto, y dijo a sus hombres: "Despues de visitar el altar, lanzare una moneda. Si sale cara, ganaremos. Si sale cruz, perderemos. El destino nos tiene en su mano."

Nobunaga entro al altar y ofrecio una silenciosa plegaria. Despues salió y lanzó una moneda al aire delante de sus hombres. Salió cara. Sus hombres tenían tantas ganas de luchar que ganaron la batalla fácilemnte.

"Nadie puede cambiar el destino.", le dijo su ayudante después de la batalla.

"Desde luego que no.", dijo Nobunaga, mostrándole una moneda trucada, que tenía cara a ambos lados.

1 comentario:

Mr. G dijo...

El tío de Do Diego de la Vega tenía una modena así. La llamaba "Florentavo".

Saludos.