Crecer y estar en armonía consigo mismo, con los de alrededor y con el universo, es el objetivo de las siete leyes espirituales del éxito, que propician una transformación positiva en el individuo.LA LEY DE POTENCIALIDAD PURA Se refiere al ser, lo que se es. Se estudia y se practica haciendo silencio, y estableciendo un compromiso de no juzgar, en contacto íntimo con la naturaleza.
LA LEY DE DAR Es lo mismo dar que recibir, porque el universo fluye de esa manera. Se ejercita aprendiendo a dar todo aquello que se quiere recibir.
LA LEY DEL KARMA O CAUSA Y EFECTO Consiste en ser consciente de las elecciones que se toman y hacerse responsable de sus consecuencias.
LA LEY DEL MENOR ESFUERZO Practicada a través de la aceptación, cuando se acepta lo que ocurre en el momento presente. La idea es no defender siempre el punto de vista propio o querer tener la razón sino llegar a acuerdos.
LA LEY DE LA INTENCIÓN Y EL DESEO Se empieza a ser consciente de cómo desear y obtener. Se desea en el presente, se pone la intención en el futuro y hay un desinterés en el resultado, que significa, por ejemplo, pensar que “no me importa si me voy a ganar un premio” o “no me importa perder”. Las acciones que se realizan de esta manera adquieren mucha potencia.
LA LEY DEL DESAPEGO Tener en cuenta que sólo existe el presente. Esta ley activa la conciencia del momento y la gloria de vivir en él.
LA LEY DEL DHARMA Es la ley del propósito en la vida. Todos los seres humanos llegan para cumplir un propósito y sólo cada uno, por sí mismo, puede descubrir cuál es. Cómo expresar ese propósito y cómo usarlo para ayudar a los demás es parte del aprendizaje.
Fuente: Primera Hora, Edición Aniversaria
Imagen: Veer
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