Al igual que en el 2007, cierro el año hablando pendejadas acerca de lo que fué mi experiencia de vida en este año que termina. Muy pocas personas se han dado cuenta de como he mejorado este último año. Solo los que tienen el cerebro estrecho y alienado comentan por allí: Pero sigue desempleado, no tiene novia, yo a su edad ya tenía esto o aquello, el debería hacer esto, actuar de tal forma, en fin, pura paja. Porque es que la evolución espiritual de una persona es vista generalmente como una pérdida de tiempo, una debilidad o una mariconada.
Estoy en un punto existencial muy interesante, donde estoy por fin conciente de cosas que torturaron mi cerebro desde que tengo uso de razón. Hace poco recibí una noticia que debía haber destruido al "anterior" Gilberto, pero con algo de meditación me di cuenta de que no debía afectarme en lo absoluto enterarme algo que tenía que ocurrir de un momento a otro.
No puedo dejar pasar esta oportunidad de agradecer a todas esas personas que me han acompañado en mi andar, a uds, mis estimadísimos lectores mudos e invisibles y a mis colegas blogueros que aunque ni se lo imagínan han sido de gran apoyo para mí. A todos les deseo un 2009 plagado de éxitos, salud y paz, mucha paz.
No haré promesas de fin de año, porque en realidad no me importa el futuro. Solo sé que trabajaré día a día, construyendo el futuro que deseo. Viviré cada instante como lo vengo haciendo hace tiempo, disfrutando de esas pequeñas cosas que los necios dejan pasar y los sabios menosprecian. Sólo sé que a las 0:01 daré un paso al caminar, tomaré aire y seguiré mi camino.